El Propóleo o Própolis es una sustancia cero-resinosa de color extremadamente variable, que oscila, a través de diferentes tonalidades, del amarillo oscuro hasta casi el negro.

Propóleo o Propólis
Propóleo o Propólis

Esta se recoge por las abejas sobre las gemas de árboles como el Álamo, Pino, Sauce, Abedul,, etc. y sobre otros vegetales que segregan resina.

La palabra Propóleo, en sentido general, se usa por lo tanto para indicar una serie de sustancias resinosas, gomosas, balsámicas trasportadas a las colmenas y transformadas por las abejas. El nombre es de origen griego y significa “delante de la ciudad”.

Las abejas, efectivamente, utilizan este material para recubrir las pareces de la colmena, para cerrar eventuales poros, para rellenar las grietas, restringir la entrada, para impregnar las celdillas del panal antes de que la abeja reina ponga los huevos y también para embalsamar los animales invasores que han matado, para impedir su putrefacción.

Historia del Propóleo

El uso del Propóleo por parte de los hombres se remonta a épocas antiquísimas.

Los egipcios lo usaban para curar numerosas enfermedades, y era uno de los ingredientes usados para la conservación de las vísceras de los faraones.

El célebre naturalista romano Plinio escribió sobre el Propóleo de manera extendida en sus “Naturalis Historia”, mientras que Aristóteles lo definió como un óptimo remedio para las afecciones de la piel.

Hay incluso quien afirma que el Propóleo también se utiliza para la fabricación de instrumentos de cuerda, hasta el punto que algunos autores atribuyen “lo extraordinario” de los instrumentos de Stradivari al Propóleo recogido por las abejas en la zona de Cremona.

Hoy en día, el Propóleo encuentra diferentes campos de aplicación, desde el dermofarmacéutico, con diferentes formulaciones, el cosmético, incluso en agricultura, donde preparaciones a base de Propóleo se utilizan para el cuidado y la defensa de las plantas en competición con los pesticidas de síntesis química.

Composición del Propóleo o Própolis

La composición química del Propóleo aún no se conoce perfectamente, ya que está formada por cientos de compuestos, muchos de los cuales todavía no se han estudiado.

El Propóleo, dado que procede de diferentes zonas geográficas, tiene componentes en porcentajes variables, pero sus principios activos más importantes (los que determina su terapéutica), es decir, la pinocembrina, la galangina, la crisina y el aceite esencial están presentes en todos los tipos de Propóleo. De todas formas hay que especificar que el Propóleo que procede de China, el cual se funde para después transformarlos en panecillos de un kilo, pierde el aceite esencial durante este proceso.

Composición simplificada del Propóleo

  • Resinas
  • Ceras
  • Aceite esencial
  • Flavonoides (crisina, galangina, pinocembrina, etc.)
  • Sales minerales
  • Vitaminas (trazas)

¿Por qué el aceite esencial del Propóleo es tan importante?

La presencia del aceite esencial en el Propóleo y en sus derivados es muy importante dada la actividad terapéutica de esta sustancia. Si los flavonoides contenido en el Propóleo tienen una importante propiedad antibactérica sobre los Gram positivos, el aceite esencial actúa sobre los Gram negativos. Así de esta manera es como actúa esta importante sinergia de acciones antibacterianas que hacen del Propóleo un gran antibiótico natural.

Aplicaciones terapéuticas del Propóleo

El Propóleo tiene importantes actividades farmacológicas.

  • Antibacteriano
  • Antiviral
  • Inmunoestimulante
  • Antinflamatorio
  • Cicatrizante
  • Ligeramente analgésico

 En Otorrinolaringología

Es sin duda este campo donde es aplicado más a menudo, sobre todo en la cura de:

  • Anginas
  • Faringitis
  • Laringitis
  • Rinitis
  • Sinusitis
  • Otitis
  • Gingivitis, aftas bucales
  • Muguete de los recién nacidos
  • Higiene dental en general, mal aliento
  • Gingivitis, glositis, estomatitis ulcerosa

En Afecciones broncopulmonares

1) Afecciones bronquiales (coadyuvante)

2) Afecciones pulmonares (coadyuvante)

En el tratamiento de patologías de las primeras vías aéreas, como laringitis, faringitis y rinofaringitis, el Propóleo permite obtener buenos resultados, mientras que en el tratamiento de las afecciones bronquiales o pulmonares se debe considerar como un excelente complemento terapéutico, como soporte de otras terapias médicas.

En casos de asma bronquial alérgica se desaconseja el tratamiento con Propóleo, ya que él mismo y sus preparados pueden causar alergias.

 En Gastroenterología

  • Gastritis
  • Ulcera gástrica
  • Inflamaciones de las vías biliares (colecistitis)
  • Colitis ulcerosa
  • Hemorroides

En los últimos años (1994) algunos investigadores japoneses, durante algunos estudios realizados sobre las propiedades del Propóleo, han resaltado una actividad “anti-Helicobacter pylori”, bacilo gram-negativo, cuya presencia en el estómago se asocia a la úlcera gástrica.

Un interesante trabajo clínico por el Dr. J. F. Auer, señala como ha tratado con Propóleo bruto micronizado algunos pacientes afectados por diverticulitis, Morbo de Crohn y diarrea de candidiasis intestinal con buenos resultados.

 En Ginecología

  • Cándida
  • Llagas uterinas
  • Inflamaciones vaginales

En Dermatología

  • Quemaduras ligeras y eritema solar
  • Micosis
  • Dermatopatías en las manos del ama de casa
  • Acné
  • Psoriasis
  • Ulceras varicosas

En la Cosmética

  • Higiene de la boca
  • Piel grasa e impura
  • Eritema solar
  • Higiene del pié

Principales indicaciones como complemento alimenticio

Ulceras bucales, dolor dental, artritis reumatoide, osteoporosis, laringitis, carcinoma nasofaríngeo, enfermedad de Crohn, úlceras estomacales, estreñimiento, cáncer colorrectal, diverticulitis, colitis ulcerosa, fatiga ocular, acné, dermatitis, eczema, prurito, psoriasis, envejecimiento, eritemas, quemaduras, cicatrización lenta de heridas, hiperglucemia, hipotensión arterial, gripe, SIDA, leucemia, infección por virus del herpes genital simplex (HSV), insomnio, depresión, ansiedad, cervicitis aguda, vaginitis, tuberculosis, carcinoma prostático, resfriados, gripe, faringitis, amigdalitis, micosis, heridas y contusiones, infecciones generalizadas, etc.

Preparados de a base de Propóleo y su uso

Propóleo extracto hidroalcohólico

Este es seguramente el preparado más completo, ya que contiene un porcentaje más alto de principios activos. La posología media para uso interno es de 20-25 gotas en un poco de agua, 3-4 veces al día. Sin embargo, para uso exterior y para gargarismos se diluyen 50 gotas en un vaso de agua.

Propóleo extracto glicólico

El preparado contiene aproximadamente la mitad de los principios activos del extracto hidroalcohólico, y además el glicol propilénico usado para la extracción resulta a menuda irritante y no adecuado para uno uso alimenticio.

La posología debe ser del doble de la del extracto hidroalcohólico.

Propóleo en opérculos

Los opérculos de Propóleo contienen generalmente 200/300 mg. de Propóleo micronizado y tiene las mismas indicaciones del Propóleo hidroalcohólico. La posología es de 2 opérculos 2 o 3 veces al día.

Propóleo en comprimidos

Los comprimidos, con el mismo contenido de Propóleo, tienen las mismas indicaciones de los opérculos pero no la misma posología. Los comprimidos tienen como ventaja el poderlos chupar y tenerlos durante muchos tiempo en la boca, para una eficaz acción oral.

Crema de Propóleo

Esta crema se usa principalmente sobre pieles grasas, impuras o con granos. Además ésta se puede aplicar sobre pieles enrojecidas o irritadas y da buenos resultados para la cura del pié de atleta.

Ungüento de Propóleo

Es un producto formulado con extracto oleoso de plantas medicinales, aceites vegetales y cera de abeja, y es óptimo para lo enrojecimientos debidos a los pañales, para la piel seca y escamosa, para los sabañones y para las manos irritadas por los detergentes.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.